viernes, 30 de noviembre de 2018

Diplomado en Animación

Para quienes llevan a la animación hasta en los huesos, los invitamos a formar parte del diplomado "El Cine de Animación como recurso de Educación Ambiental", impartido en la FES Acatlán, UNAM. Con él podrán darse cuenta de los múltiples caminos que puede seguir la animación en el mundo actual. Los ponentes son:

  • Mtro. Juan Barajas González
  • Dr. Laura González Morales
  • Mtro. Daniel Lara Sánchez
  • Mtro. Tarsicio Chárraga Pineda
  • Mtro. Raúl Cárdenas Rivera

Dejamos la siguiente liga para mayor información:




viernes, 14 de julio de 2017

Pequeñas voces o cómo la animación también puede denunciar la injusticia



Por María Celeste Vargas Martínez y Daniel Lara Sánchez (Los Anima-Dos)


Hace algunos días pudimos disfrutar en casa (no sabemos si alguno de los monopolios de la distribución cinematográfica en México la programó en sus salas) una película animada fuera de lo común: Pequeñas voces, producción colombiana del 2012, dirigida por Jairo Eduardo Carrillo y Óscar Andrade, con guion de los mismos realizadores, que rescata y muestra el testimonio de varios niños que han sufrido la violencia en ese país a causa de los conflictos entre el gobierno y la guerrilla.
            Cuatro voces, cuatro historias, cuatro realidades duras y violentas. Si bien no es la primera vez que se cuenta el horror de un conflicto armado a partir de las voces de los propios infantes que lo sufren (recordamos, por ejemplo, el excelente documental Promesas, del 2001), ni siquiera en el campo de la animación (ahí están los diversos cortometrajes de la UNICEF como la serie Cuentos sin hadas), sí es una producción que, además de funcionar como documental y denuncia, resulta una cinta narrativamente atractiva, con un relato bien construido a partir de las historias que los propios pequeños (Margarita, John, Juan y Pepito) cuentan.
            La elaboración técnica de la película es, por decir lo menos, creativa y atrayente. La combinación de diversas formas de animación (recorte, animación tradicional y por computadora) si bien por momentos pareciera no “empatar” del todo, el efecto se justifica por ser una narración realizada por los propios niños, lo que explica la visión infantil que los directores quisieron plasmar. De hecho, resulta muy emotivo que los personajes secundarios sean dibujos realizados por los propios pequeños narradores, mientras los principales son diseñados y animados por los artistas animadores. Esta combinación logra provocar sonrisas al espectador, a pesar de la brutalidad implícita del relato.
Resultado de imagen para pequeñas voces
            Porque eso sí: a pesar de que escenas como la bomba que le arranca una mano y una pierna a John, el secuestro del padre de Margarita, la tristeza de los perros de Pepito al ser abandonados en su hogar mientras su familia parte a Bogotá, el miedo de Juanito a disparar un arma o ver cómo sus compañeros de escuela son asesinados en combate,  provocan un nudo en la garganta o lágrimas discretas, también podemos contemplar secuencias chuscas que reflejan la inocencia infantil y arrancan carcajadas a la audiencia.
            La película es, entonces, una metáfora animada del conflicto. Conflicto entre el mundo urbano y rural de ese país sudamericano; conflicto entre una guerrilla que se dice revolucionaria y un gobierno que se dice democrático (de hecho, la cinta nunca toma partido); conflicto entre la inocencia y una realidad que lleva a los niños a madurar a mil por hora; conflicto entre la risa y el espanto; conflicto entre los recuerdos y el presente.
            Por momentos, esta producción nos recordó los cortometrajes realizados en México por el artista francés Dominique Jonard, quien a partir de la técnica de recorte, también ha dado voz a muchos niños indígenas de nuestro país y les ha llevado a contar sus historias con sus propias voces. De hecho, algo que nos llamó demasiado la atención es que, uno de los narradores de Pequeñas voces, se expresa con una corrección del lenguaje y una claridad de pensamiento que ya quisieran muchos políticos mexicanos.
            Pequeñas voces ganó diversos premios en su país y en festivales internacionales, muy merecidos todos. En su momento, se anunció como la primera película colombiana en 3D. No sabemos con seguridad si el dato es real, pero eso es lo menos importante. Lo que debe resaltarse de este breve largometraje (si se nos permite la expresión) es su valentía y su atrevimiento al denunciar la guerra desde la visión de cuatro niños igual de valientes. También nos lleva a reflexionar: nunca serán suficientes todos los esfuerzos por recordar que la guerra, no es más que una situación que nadie, pero menos los pequeños, deberían vivir.
            Y por cierto… ¿Algún día la animación mexicana se atreverá a hacer algo parecido?
            Hasta la próxima y... ¡Anímense a opinar!



domingo, 2 de abril de 2017

Seguimos perdiendo a nuestros pioneros de la animación mexicana

Por Celeste Vargas y Daniel Lara

Lamentablemente hoy hemos recibido una mala noticia: hace algunos meses falleció uno más de los grandes que forjaron la historia de la animación mexicana. Un representante de aquella historia de la cual nadie se quiere acordar (todos siguen creyendo que la animación nacional surgió en el 2003). Un artista creativo, sensible, talentoso, cuyos diseños le dieron vida a incontables producciones y cuyas historias reflejaban una nobleza traducida en un humor limpio y sin necesidad de doble sentido. Nos referimos al querido don Sergio de la Torre Miraval, quien nos favoreció con su amistad y confianza durante muchos años. 
    Don Sergio estuvo en los estudios de animación más importantes del siglo pasado en México, tuvo la oportunidad de aprender la técnica de animar en Estados Unidos, al lado de grandes como Bill Meléndez. Un artista completo, humilde y olvidado como muchos otros pioneros de la animación mexicana.   
    Agradecemos los momentos que nos dedicó, la confianza para mostrarnos toda su obra artística y la oportunidad que nos dio de trabajar con él. Nosotros perdemos a un amigo y la animación mexicana a uno de sus grandes artistas.